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Sonia Madrid, autora

Plácido y Domingo en su aparente delirio nos llevan de la mano a través de los entresijos de la condición humana. Hay algo de Vladimir y Estragón en ellos.

 

Plácido y Domingo también esperan a su Godot, esperan el lunes. Son dos personajes suspendidos en una ensoñación, perdidos en su mar de emociones, sensaciones y recuerdos.

 

Son reflexivos, filósofos, poetas, payasos... y protegidos en su pureza se atreven a abordar temas complejos como la propia existencia o la muerte.”

Raquel Pérez, directora 

“Para mí esta obra habla de la soledad y de cómo el ser humano es capaz de mostrar lo mejor y lo peor de sí mismo en situaciones extremas.

 

Plácido y Domingo se enfrentan al encuentro con la muerte con los pocos recursos que les quedan. Desde la más absoluta generosidad hasta la miseria más cruel.

 

En cuanto a la puesta en escena, he querido oponer una cruda realidad, seca y desprovista de artificios y en la que ninguno de los dos se salva, a la poética del texto. Y todo esto apoyado en un oscuro sentido del humor.”

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